Aquí os presento una nueva producción de la marca de la estrella, con este SLS AMG quieren corregir algunos errores que tuvieron con el SLR de McLaren, digo errores pero la verdadera responsabilidad no fue en ningún caso de Mercedes, sino de los amigos de Hamilton, este superdeportito esta pensado para sustituir al SLR.
Este vehículo se suma a la productiva moda que últimamente vemos con otros modelos de categorías inferiores; los rasgos mas clásicos y retro que podemos observar en este coche son las típicas alas de gaviota y el característico morro del 300 SL, que se comercializo en el año 1954, y que está considerado como uno de los coches mas bellos de las balas de plata. Esta es una de las razones por las que Mercedes se ha involucrado en un proyecto como este.
Las cotas de este coche se han reducido considerablemente si lo comparamos con el SLR, acercándose a su vez al Aston Martin DBS y Ferrari 430. La razón de la reducción del tamaño es el compromiso adquirido por AMG de realizar un vehículo ágil y rápido, capaz de transmitir a su conductor grandes sensaciones, como el encanto de oír bramar los tubos de escape, que aunque penaliza bastante en el confort de marcha le da un innegable carácter deportivo al vehículo.
En el apartado técnico podemos empezar por decir que este superdeportivo ha sufrido una dieta de reducción de peso en comparación con su hermano mayor y antecesor, el SLR, en nada menos que 136 Kg quedándose en 1.658kg lo cual esta claro que redunda en unas mejores prestaciones y consumos. En el campo prestacional no cabe duda que el mejor aliado de AMG es el más que probado bloque de 8 cilindros en V de 6.2 litros, que en este caso rinde 563 cv a 6.800 rpm y un par motor de 650 Nm. El motor va colocado justo detrás del eje delantero, lo que conocemos como posición delantera-central.
Las prestaciones de este coche con el cronometro en la mano son muy buenas. El SLS AMG monta una caja de cambios de 7 velocidades muy probada por la marca, montada en el eje trasero para un excelente reparto de masas y un doble embrague (esto sí que es una novedad en la marca de la estrella), aseguran un aceleración de 0 – 100 km/h de 3.8s. y una velocidad máxima de 315 km/h, claro que lo más importante de este coche para pasárselo bien no es solo ese imponente motor sino el magnífico trabajo realizado sobre el bastidor por parte del especialista alemán en carreteras con curvas, en el cual su batalla de 2.679 mm hace que el paso por curva se realice fulgurantemente.
Mercedes ha hecho uso de la máxima de otra marca alemana (Porsche) que dice que para poder correr hay que asegurarse que se puede parar. Aquí los ingenieros de Mercedes no han escatimado ni un ápice de esfuerzo y tecnología aplicando dos frenos cerámicos perforados de 15.4” pulgadas en el eje delantero y 14.2 en el trasero, con los que se puede contener a este SLS AMG. Lo que dudo es que haya freno suficientes para poder contener a la marabunta de clientes que recibirán con agrado este modelo, ya que su precio oscilara entre los 150.000 – 180.000€, una cantidad que más o menos se reduce a la mitad de lo que valía el SLR. Los primeros ejemplares se empezaran a entregar en Alemania en el año 2010.
Mi opinión personal es que Mercedes ha dado en el blanco con esta producción, y estoy deseando poder ver este coche en persona ya que siempre nos recordara a ese mítico 300 SL que hizo historia. Y, por lo menos, se han bajado de la burra haciendo más asequibles que el SLR, al que sólo podían acceder uno pocos.
Espero os haya gustado y, como digo siempre, abrir bien los ojos, en nuestras calles hay muchas joyas rodando.
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